San Juan, magia nocturna entre hogueras y espumosos
Tengo que confesar que hoy tengo los nervios a flor de piel y la mente sentada en la orilla pero ¡con los pies a remojo! Se acerca San Juan... ¡la noche más mágica del año! Una noche llena de rituales, fuego, emociones y buenas vibraciones. En San Juan se celebra la llegada del solsticio de verano. Un salto a la mejor estación del año que conviene hacer de la mejor manera posible. Quemando lo malo y dejando espacio para todo lo bueno. El verano ha llegado para quedarse y hay que prepararse para recibirlo. ¡Y hacer lo posible para que no se vaya nunca más!
En Barcelona, el día más largo del año da paso a una noche intensa, cargada de fuego, hogueras, petardos, celebraciones y muchos, muchos brindis. En mi ciudad no esperamos a que se ponga el sol para empezar la fiesta. La Llama del Canigó se enciende en la Plaza Sant Jaume por la tarde. ¡Es todo un espectáculo! Quien quiera disfrutar del enigma de esta noche y encender una hoguera tiene que ir hasta allí a recoger la llama. Y en cuestión de horas, ¡hay una hoguera en cada esquina y la ciudad se convierte en una gran FIESTA!
Normalmente espero la llegada del fuego en mi rincón favorito. ¡La playa! Este año tan especial se celebrarán pequeñas fogatas, así que he decidido organizar una pequeño encuentro con amigos. En lugar de quemar algo viejo, contaremos historias que queremos quemar para dejar paso a nuevas experiencias. Y, entonces… ¡estallido de alegría! Recibiremos la noche más corta del año descorchando BORN ROSÉ Brut y dejando que las burbujas llenen nuestras copas. Y es que, ¿hay mejor noche para disfrutar de un espumoso? Hoy toca vibrar con su finas burbujas, refrescarse con sus notas de fruta fresca y flores y brindar hasta que salga el sol. ¡Es noche de verbena!
San Juan es una noche mágica y este año pienso cumplir con toooodas las tradiciones. ¡Me encantan! Estoy deseando mojar la coca de San Juan en mi copa de BORN ROSÉ Brut y pedir mi deseo. Hay quien dice que esta noche todos los sueños se cumplen. Solo tienes que poner una ramita de muérdago bajo la almohada y dormirte pensando en tu deseo. Yo ya tengo el mío claro. Este verano quiero encuentros, abrazos y burbujas, muuuchas burbujas. ¡La combinación perfecta!
¡Feliz San Juan!